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martes, 30 de noviembre de 2021

¿EVOLUCIÓN O LA PALABRA DE DIOS?

 Dave Hunt

                                                                           

Muchos de los no-católicos se sorprendieron cuando el Papa Juan Pablo II escribió a favor de la evolución en un documento vaticano para la Academia Pontifical de Ciencias, el 23 de octubre de 1996. Pero en realidad, él solamente recalcaba la posición oficial del catolicismo. Considera los siguientes extractos:

 

“En su encíclica Humani generis (1950), mi predecesor Pío XII ya había dicho que no había oposición entre la evolución y la doctrina de la fe acerca del hombre... Pío XII enfatizó este punto esencial: que si el cuerpo humano toma su origen de materia viva preexistente, el alma espiritual es creada inmediatamente por Dios...el exegeta y el teólogo deben mantenerse informados acerca de... las ciencias naturales... la verdad no puede contradecirse...”.

“La teoría de la evolución... ha sido aceptada progresivamente por los investigadores, después de una serie de descubrimientos en los diferentes campos de conocimiento. La convergencia... de los resultados de trabajos que fueron llevados a cabo independientemente es en sí un argumento significativo a favor de esa teoría”. 1

            Sin lugar a dudas, el fiasco vergonzoso del juicio de Galileo estaba en la mente del Papa cuando él avisó a los teólogos de la Iglesia a “mantenerse informados acerca de... las ciencias naturales...”. El Papa Urbano VIII amenazó a Galileo, ya viejo y enfermo, con tortura si no renunciaba a su afirmación de que la tierra se movía alrededor del sol. De rodillas ante el Santo Oficio Romano de la Inquisición, y temiendo por su vida, Galileo se retractó de esa “herejía”, pero no en su corazón. El dogma oficial de la Iglesia Católica Romana decía que el sol y todos los cuerpos celestiales se movían alrededor de la tierra, y fue afirmado repetidamente por varios Papas “infalibles” hasta el año 1992, cuando el Vaticano por fin admitió oficialmente que Galileo tenía razón.

                    Así que, para que la ciencia no siguiera haciendo necios a la jerarquía “infalible” de la Iglesia, el Papa ahora aconseja a los teólogos católicos a consultar con los científicos antes de interpretar las Escrituras. Pero San Pedro, quien los católicos alegan que fue el primer Papa, declaró que las Escrituras son inspiradas por el Espíritu Santo (2 Pedro 1:21). ¡Seguro que el Espíritu Santo no necesita ayuda de “científicos”! Si la Biblia no es infalible cuando habla acerca de ciencia, entonces, ¿por qué confiar en ella cuando habla de Dios o la salvación? Eduardo Daschbach, un sacerdote católico, explica que si tomamos la Biblia literalmente, ¡esto requeriría que la mujer encima de la bestia en Apocalipsis 17 fuera la Iglesia Católica Romana! Él escribe:

“La Iglesia, entonces, no acepta...la interpretación literal de los primeros capítulos del libro de Génesis... Cuando los partidarios de la ciencia creacionista aplican sus herramientas fundamentalistas a este último libro de la Biblia (Apocalipsis), la Iglesia a menudo viene a ser objeto de ataques sin misericordia...” 2

            Los evangélicos como Charles Colson que han unido sus fuerzas con las de Roma, dicen que el catolicismo está de acuerdo con ellos y que afirman los dos que la Biblia es inerrante. Al contrario, un documento explica que según el Concilio Vaticano II: “la Biblia está libre de error en lo que pertenezca a la religión, lo que fue revelado para nuestra salvación. No es necesariamente libre de error en otros temas (por ejemplo, la ciencia natural)” [énfasis en el original].3

            Esto no es nada para tomar a la ligera. Si el relato de Génesis acerca de la creación no es digno de confianza, entonces tampoco lo es el resto de la Biblia, que descansa sobre Génesis, y Jesucristo resulta no ser Dios, sino un mero hombre que neciamente tomaba la historia de Adán y Eva literalmente (S. Mateo 19:4-5), y entonces no puede ser nuestro Salvador. El periódico El Ateo Americano conoce estos temas bien: “Destruye a Adán, Eva y el pecado original, y en los escombros encontrarás los restos patéticos del Hijo de Dios, y quitarás todo el significado de su muerte”. 4

            En mayo de 1982, honrando a Charles Darwin en el centenario de su muerte, la Academia Pontifical de Ciencias, del Vaticano, declaró lo siguiente: “Evidencias masivas ponen la aplicación del concepto de evolución... más allá de disputas serias”. 5 La New Catholic Encyclopedia (Nueva Enciclopedia Católica) dice:

    

“Los especialistas... durante un periodo de 100 años, han acumulado la evidencia necesaria... evolución ha sido establecida de la manera más completa que la ciencia puede establecer datos...” 6

            No es cierto. Un número creciente de científicos, que incluye a algunos que no son cristianos, se oponen a la evolución. El astrónomo/matemático Sir Fred Hoyle dice, “el mundo científico ha sido engañado para que crea que la evolución ha sido comprobada. Nada podría estar más lejos de la verdad”. 7 El biólogo Michael Denton, autor del libro Evolution: A Theory in Crisis [“Evolución, Una Teoría en Crisis”], dice que la ciencia ha desacreditado tanto la evolución del modelo de Darwin, que debe ser descartada. El profesor de matemática Wolfgang Smith llama a la evolución “un mito metafísico...totalmente carente de apoyo científico”. 8

            Colin Patterson, paleontólogo principal del Museo Británico de Historia Natural confesó, después de más de 20 años de estar involucrado, “No había una sola cosa que yo sabía acerca de ella. Es chocante aprender que uno puede ser engañado por tanto tiempo”. Patterson “empezaba a preguntar a otros científicos, diciéndoles que le dijeran una cosa que sabían por cierto acerca de la evolución”. Los biólogos del Museo Americano de Historia Natural en Nueva York se quedaron sin palabras. Afirma Patterson:

“Probé haciendo la pregunta a la Facultad de Geología del Field Museo de Historia Natural, y la única respuesta que recibí fue silencio. Hice la pregunta a los miembros del Seminario de Morfología Evolucionista en la Universidad de Chicago, un cuerpo prestigioso de evolucionistas, y la respuesta fue un silencio muy largo, después del cual una persona alzó la voz y dijo: “Yo sé una cosa, que eso no debe ser enseñado en el colegio”. 9

            No obstante, en el juicio Edwards v. Aguillard, 482 U.S. 578 (1978), el Tribunal Supremo [EE.UU.] declaró no constitucional enseñar en las escuelas públicas el creacionismo, ni siquiera como una teoría al lado del darvinismo. Con razón se quejan los evangélicos de que la evolución es enseñada como un hecho científico en las escuelas públicas, pero también es enseñada así en las escuelas católicas. 10 En The Catholic World Report [Reportaje Del Mundo Católico], Esteban F. Smith escribe, “en la escuela católica aquí en la archidiócesis de Washington D.C., nos enseñaron la teoría de Charles Darwin acerca de la evolución como si fuera la verdad del santo evangelio”. 11 El bioquimista Michael Behe dice acerca del tiempo que pasó en escuelas católicas:

“Fui... enseñado que la vida... venía de Dios, y... la predominante explicación científica de como lo hizo era la teoría de Darwin de evolución. No vi ningún conflicto con la enseñanza de la Iglesia”. 12

             En su libro, The Blind Watchmaker [El Relojero Ciego], el zoólogo Richard Dawkins de la Universidad de Oxford, un evolucionista de renombre, llama a la biología “el estudio de cosas complicadas que dan la apariencia de haber sido diseñadas con un propósito”. 13 ¡Por cierto! Una célula, la más pequeña de las entidades vivas, podría contener 100.000 moléculas y tener 10.000 reacciones químicas interrelacionadas y simultáneas. ¡Las células no podrían surgir por casualidad! Dawkins admite que cada célula contiene en su núcleo “una base de datos dígitalmente codificado y más grande...que todos los 30 tomos de la Enciclopedia Británica”. 14 ¡No puedes ni imaginar el factor de probabilidad en contra de que se produzca por casualidad una enciclopedia de 30 tomos! Hablamos de una célula, y hay miles de millones de ellas en el cuerpo humano, miles de tipos diferentes, ¡todas trabajando en una relación increíblemente compleja y delicadamente equilibrada!

            La probabilidad astronómica hace que la evolución sea matemáticamente imposible. Hoyle calculaba que la probabilidad de producir solamente los enzimas básicos al azar, se representan con la cifra 1 sobre 1 seguido por 40.000 ceros. Por comparación, la probabilidad de coger un átomo específico de todos los que hay en el universo se representa con la cifra 1 sobre 1 seguido por 80 ceros. Aunque cada átomo fuera un universo, la probabilidad de coger uno en particular de todos aquellos universos, no llegaría a ser más de 1 sobre 1 seguido por 160 ceros. ¡Repito, la probabilidad de que se produzcan solamente los enzimas básicos es 1 sobre 1 seguido por 40.000 ceros! Pero los enzimas hacen cosas increíbles, lo cual complica todavía más el tema de la probabilidad.

 

            ¿Por qué la sangre coagula solamente en el lugar de la herida, y no dentro de las venas y arterias, y deja de coagular cuando el cuerpo ya no sangra? ¡Imagina los miles de millones de animales que hubieran muerto sangrando, antes de que ese increíble proceso de coagulación se perfeccionara por casualidad! El sistema inmunitario es todavía más maravilloso, dice Behe: “La complejidad del sistema es fatal a todas las explicaciones del darvinismo”. 15 Y así es también con centenares de sistemas vivos. Recuerda, estos sistemas complejos deben ser operativos para tener valor; es decir, no podrían evolucionarse en fases.

            En su excelente libro de 1996, Darwin's Black Box [La Caja Negra de Darwin], Behe documenta la complejidad incomprensible de la vida en su nivel básico: químico-celular; que tiene una complejidad que Darwin no se imaginaba. Behe, que dice que la evolución “se debe prohibir”, 16 derriba la teoría de Darwin, ofreciendo múltiples ejemplos a nivel bioquímico de elementos complicadamente diseñados e “irreduciblemente complejos” que no podían evolucionarse:

 “[La evolución] no puede explicar el origen de las estructuras bioquímicas tan complejas que fundamentan la vida. Ni siquiera lo intenta...La conclusión de que hay diseño inteligente es algo que se deriva de los datos mismos, no de libros sagrados ni creencias sectarias”.17

             Apoyando al Papa, Donald Devine escribe: “el hombre prehumano [así hablan] aparentemente existía durante millones de años.. .Esto no es una refutación de la Biblia sino una confirmación de ella, que hacía falta que Dios respirara el alma para que el hombre fuera hombre”. 18 ¡El caso es lo contrario! La evolución teísta, que requiere que el hombre tenga antepasados prehumanos (de los cuales nunca se ha hallado ninguna evidencia), contradice no solamente el Génesis sino la Biblia entera.

            Moisés dice que Dios formó a Adán del “polvo de la tierra”, y luego formó a Eva de “una de sus costillas” (Génesis 2:7; 18-22). No se puede reconciliar la idea de antepasados prehumanos con este relato, y es un relato ratificado por Jesucristo: “¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo, y dijo: Por esto el hombre dejará padre y madre, y se unirá a su mujer, y los dos serán una sola carne?” (Mateo 19:4-5). Cristo confirmó así con esta cita lo que dice Génesis. San Pablo también testificaba acerca de su veracidad cuando declaró que “Adán fue formado primero, después Eva” (1 Timoteo 2:13, ver también 1 Corintios 15:22, 45; Judas 14). No eran una pareja de criaturas prehumanas en las cuales Dios sopló almas humanas.

            Además de esto, el apóstol Pablo dice que el pecado entró en el mundo por Adán, y la muerte por el pecado (Romanos 5:12). Si Adán y Eva hubieran tenido antepasados que durante miles o millones de años hubieran vivido y muerto, evolucionándose hasta que Dios los humanizara, entonces la muerte habría estado operativa en la tierra antes del pecado de Adán, lo cual es una contradicción clarísima de Génesis, la doctrina de Cristo, la predicación de Pablo y el evangelio. (El Cardenal O'Connor de Nueva York dice que quizás Adán y Eva fueran “animales inferiores”. 19)

             La evolución, la “más gorda de las vacas sagradas”, 20 ha sido una herramienta poderosa de Satanás para persuadir a millones de que la Biblia no es fiable. Como dijo Felipe Johnson, profesor de Derecho en la Universidad de Berkeley: “Todo el propósito de la historia evolucionista de Darwin es... demostrarte que no necesitas una inteligencia preexistente... [para] creación”. 21 Johnson sorprendió al mundo académico en 1991 con su libro Darwin on Trial [“El Juicio de Darwin”]. Con la precisión de un abogado veterano, destruyó el darvinismo y acusó a los evolucionistas de “abandonar los informes verdaderos y precisos que la ciencia ha hecho tradicionalmente, en su celo por extirpar y acabar con la religión...”. 22

            ¡El proceso de la evolución hubiera llenado la tierra con miles de millones de fósiles de criaturas intermedias, pero ni uno de estos “eslabones perdidos” ha sido encontrado! Imagina los restos de los millones de pequeños incrementos de la evolución durante los millones de años que hubieran sido necesarios para desarrollar cosas como pulmones para reemplazar agallas, alas de donde no había nada, el estómago y el sistema digestivo, los ojos, los riñones, el cerebro y sistema nervioso en todo el cuerpo, la sangre, el esperma y el huevo en los mamíferos, el huevo y su cáscara para las aves y los reptiles, etc. Se complica la imposibilidad cuando consideramos que cada uno de estos sistemas es increíblemente complejo y no podría evolucionarse gradualmente, sino que tendría que ser plenamente operativo para sostener la vida y ayudar en la “supervivencia”, por ejemplo, el sistema complicadísimo del radar de los murciélagos.

            ¿Cuántos millones de golondrinas de mar (de Antártida) murieron hasta que la primera “aprendió” por casualidad cómo navegar volando los miles de kilómetros del océano? ¿Cuántos salmones se perdieron y nunca llegaron a su arroyo nativo para reproducirse antes de que esta habilidad misteriosa se desarrollase? ¿Cuántas arañas murieron de hambre hasta que por casualidad el mecanismo maravilloso para hacer telaraña apareció de la nada, y quién enseñó a las arañas cómo emplear este invento? ¿Cuántos huevos de toda clase de ave se pudrieron hasta que el instinto de incubarlos se desarrolló? ¿Cómo fue aprendido y pasado a otras?  Existen incontables imposibilidades acerca de “la casualidad”.

            La preocupación moderna en cuanto a las especies en peligro es algo que contradice a Darwin. La evolución es algo que elimina a los no aptos. Uno no puede creer en la evolución y a la vez trabajar para la preservación ecológica de las especies. Como el último producto de la evolución, el hombre debería borrar sin misericordia todos los demás rivales para la supervivencia. Hay un sinfín de contradicciones.

            En su último libro, Reason in the Balance [“La Razón en la Balanza”], Felipe Johnson argumenta que solamente la creación por Dios puede explicar la conciencia moral del hombre. La naturaleza no tiene moral. El sentido humano de ética y moral desaprueba la evolución. Si la evolución es verdad, debemos cerrar todos los hospitales, quitar todos los medicamentos y dejar a los débiles morir. No puedes reconciliar la benignidad y la compasión con la ley de la supervivencia del más apto, que la evolución decreta.

            Pero el hombre es impulsado por conciencia y compasión, y éstas son evidencias de que él ha sido creado a la semejanza de un Dios de santidad y amor. Rechazando la evidencia abrumadora de diseño en el mundo alrededor suyo (Romanos 1:18-32), y rehusando obedecer las leyes que Dios escribió en su conciencia (Romanos 2:14-15), el hombre ha caído víctima de su propio egoísmo y ha sido presa de toda clase de maldad. No obstante, Dios ama al hombre, y en amor y gracia Él vino a este mundo, nacido de una virgen, como el Hombre perfecto e inmaculado, para que pudiera morir en nuestro lugar y pagar la pena infinita que Su propia justicia demanda por el pecado.  Es sólo sobre esta base, la que está establecida sobre el hecho de que Cristo pagó plenamente la paga del pecado, y la aceptación que cada uno debe hacer de esta sustitución, que el hombre puede llegar a ser nueva criatura en Cristo. ¡Estemos firmes sobre la verdad del evangelio de Jesucristo y la Palabra de Dios que lo declara. Mantengámonos con firmeza en contra de cada intento a diluir, pervertir o claudicar la verdad de Dios!

Dave Hunt



1 El Papa Juan Pablo II, “Mensaje a la Academia Pontifical de Ciencias”, L'Osservatore Romano (30 octubre, 1996), 3, 7.

2 Padre Edward Daschback, S.V.D., “Catholics and Creationism”, Visitor (21 octubre, 1984), 3.

3 Vaticano II, Concilio Vaticano II, Divina Revelación, (versión parafraseada por los Caballeros de Colón), III.11e.

4 The American Atheist [El Ateo Americano] (1978), 19, citado en The Christian News [El Noticiero Cristiano] (11 noviembre, 1996), 15.

5 Dasbach, loc. cit.

6 New Catholic Encyclopedia [Nueva Enciclopedia Católica], vol. 5 (McGraw-Hill, 1967), 689.

7 George W. Cornell, “Scientist calls Darwin evolution theory absurd” [Científico clasifica de absurda la teoría de Darwin de la evolución], Times-Advocate (10 diciembre, 1982), A10.

8 Wolfgang Smith, Teilhard and the New Religion [Teilhard y la Nueva Religión] (Tan Books, 1988), 242.

9 Thomas E. Woodward, “Doubts About Darwin” [Dudas Sobre Darwin], Moody (Septiembre 1988), 20.

10 The Times Picayune (Florida, 25 octubre, 1996), A-30.

11 Stephen F. Smith, “Is Darwinism A Religion?” [¿Es el Darvinismo una Religión?], The Catholic World Report (diciembre 1996), 50.

12 William Bole, “Of biochemistray and belief” [La bioquímica y la fe], Our Sunday Visitor [Nuestro Visitante del Domingo] (1 diciembre, 1996), 6.

13 Richard Dawkins, The Blind Watchmaker [El Relojero Ciego] (Inglaterra: Longman 1986), 1.

14 Dawkins, op.cit., 18.

15 Michael J. Behe, Darwin's Black Box: The Biochemical Challenge to Evolución [La Caja Negra de Darwin: El Reto Bioquímico a la Evolución] (The Free Press, 1996), 139.

16 Behe, op. cit., 186.

17 Behe, op. cit., 192-93.

18 Donald Devine, Human Events [Eventos Humanos] (13 diciembre, 1996), 19.

19 Los Angeles Times (30 noviembre, 1996), B13.

20 Doug Bandow, “Fossils and Fallacies” [Fósiles y Falacias], National Review (29 abril, 1991), 47.

21 Russel Schoch, “The Evolution of a Creationist” [La Evolución de un Creacionista], California Monthly (noviembre 1991), 22.

22 The Catholic World Report [El Reportaje Del Mundo Católico] (diciembre 1996), 50.

lunes, 1 de octubre de 2018

LA PSICOLOGÍA Y LA PSICOTERAPIA


     De acuerdo con el Diccionario de Merriam-Webster, la psicología es definida como  "la ciencia de la mente y del comportamiento".  ¿Es la psicología una ciencia?  Bueno, sí y no, dependiendo del entendimiento del término "ciencia".Si uno considera el estudio de la psicología como simplemente la búsqueda del conocimiento del comportamiento humano, algunos estarían satisfechos con la definición de la psicología como una ciencia.  Sin embargo, ese significado es muy vago y está bastante lejos de un real conocimiento científico obtenido a través de una metodología científica que implica la observación objetiva, pruebas, pruebas de hipótesis, inducción, repetición y verificación y en última instancia, dando por resultado un comúnmente aceptado conocimiento acumulativo. La psicología difiere en gran medida, por ejemplo, de las ciencias de la astronomía, física, química, geología y la biología, cuyo conocimiento ha sido acumulado a través de medios objetivos.
     La psicología afirma ser una ciencia, pero no ha podido producir la documentación objetiva necesaria para probar que realmente es una ciencia. Su énfasis principal es sobre el comportamiento humano, que no puede cuantificarse en ninguna manera significativa. La naturaleza de elecciones humanas es extremadamente subjetiva, la cual implica las emociones, valores y conciencia, y que ninguna de las cuales puede ser medida; y tampoco se puede hacer eso con la mente, ya que no es una parte física de la composición humana. El problema o dilema en definir la psicología como una ciencia no sería digno de debate, excepto que el término "ciencia" ejerce gran influencia. Legítimo o no, la etiqueta de "ciencia" impresiona a las masas.
     Existen como 100 disciplinas de psicología las cuales cubren muchas áreas desde un análisis de comportamiento aplicado a una psicología transpersonal.  La psicoterapia, o asesoramiento psicológico, o psicología clínica, es la más prevalente.   Los estadounidenses gastan más de 200,000 millones de dólares al año tratando de curar o aliviar sus trastornos emocionales y mentales,  generalmente a través de la psicoterapia.
     La psicoterapia, que es también llamada, "la terapia verbal (o hablada)" o simplemente "terapia", es un proceso por el cual se trata de solucionar problemas psicológicos a través de una comunicación y factores en una relación entre una persona (paciente o cliente) y un profesional capacitado de salud mental.       La psicoterapia es realmente psicoherejía. Su engaño sutil abre la puerta a otras decepciones, substitución o adición de opiniones que no han sido verificadas a través de medios objetivos, opiniones de hombres que no son científicas y que son añadidas a la Palabra de Dios, y por lo tanto de esta manera, restando la confianza absoluta en la verdad bíblica acerca de Dios.  
     La psicoherejía niega la suficiencia de las Escrituras en lo que respecta a la mente, alma y voluntad.  Esta intrusión de nociones psicológicas proviene de la sabiduría de los hombres y llega a influenciar la predicación y la práctica del Cristianismo, especialmente en cuanto a la naturaleza del hombre, cómo él vive y cómo él cambia.  Es imperativo que examinemos cómo estas ideas psicológicas pueden engañar a los cristianos. En cuanto a la aplicación de la psicoterapia a los problemas de la vida, lo que hace es socavar la fe de un creyente con respecto a los asuntos del alma. Una vez que una persona se aparta de la infalible, autoritativa y suficiente Palabra de Dios, ésta persona se hace vulnerable a decepciones en muchas otras áreas.   
     La psicoterapia se basa en las teorías de la personalidad que son simplemente opiniones  no comprobadas y de origen ateo, agnóstico y de otra índole, no cristianos. Estas teorías no son como las teorías científicas. Son simplemente colecciones de opiniones seculares y, en muchos casos, estas creencias a menudo se contradicen entre sí. La terapia, en realidad es un proceso que simplemente requiere "hablar", lo cual incluye los problemas  del cliente o paciente y el ayudar al cliente a verse a sí mismo, desde el punto de vista de cualquier teoría en particular, que es utilizada por el terapeuta. La psicoterapia (o consejo psicológico) es el más subjetivo y por lo tanto la rama más engañosa de la psicología.
     El "Sincretismo" es "la combinación de diferentes formas de creencia o prácticas".  Es una de las técnicas más atractivas y engañosas de Satanás, ideadas para destruir la verdadera fe y socavar la confianza del cristiano en la Palabra de Dios y su dependencia en Cristo. La psicoterapia y sus psicologías subyacentes son realmente religiosas en naturaleza y en práctica. ¡Son como agua y aceite! El eufemismo para este tipo de Sincretismo es "integración", que se produce cuando se combinan dos o más ideas o sistemas. Sin embargo, creencias psicoterapéuticas no pueden integrarse verdaderamente con la Escritura. Una trabaja con el hombre viejo en la carne (carnal); y el otro trabaja con el nuevo hombre en Cristo (espiritual). Existe una enemistad entre ambas, así como la carne y el espíritu son contrarias entre sí (Gálatas 5:17) y así como el hombre carnal está en enemistad con Dios (Romanos 8:7). No se mezclan, porque son enemigos como los ídolos de las naciones alrededor de Israel estaban en enemistad con Dios.
     Los cristianos que mezclan la psicología con la Biblia no están practicando ni promocionando una integración ordinaria, sino un sincretismo religioso, sobreponiendo su psicología con la Biblia.  Esto en última instancia va a camuflar los sistemas religiosos psicológicos que están utilizando y también este psico-sincretismo subvierte y sustrae de la fe. La "integración" de la psicología con el Cristianismo atrae a aquellos Cristianos quienes creen que lo que se está descubriendo acerca de la mente, la voluntad y las emociones es ciencia, que es parte de la creación de Dios aún por descubrirse de la misma manera que se han hecho descubrimientos en física, química y biología. Al mismo tiempo que la psicología tergiversa su definición y se hace pasar como ciencia, sus ideas psicoterapéuticas son organizadas en teoría y muchos pastores no se dan cuenta que estas teorías científicas son simplemente otro sistema competitivo de creencia.   
     En lugar de añadir conocimiento al conocimiento con descubrimientos más recientes sobre un cuerpo de información sólida, en este caso, un sistema contradice al otro, un conjunto de opiniones se intercambia por otro, y un conjunto de técnicas sustituye al otro. La psicoterapia cambia o se adapta con las actuales tendencias culturales. Sólo el saber que este sistema es una acumulación de unos 500 sistemas psicoterapéuticos, cada uno demandando y pretendiendo superioridad, debería disuadir a cualquier persona de pensar que tantas opiniones diversas no pueden ser científicas ni tampoco objetivas. La psicoterapia y sus psicologías subyacentes son acumuladas en una gran confusión, con su pseudo-conocimiento y pseudo-teorías resultando en una pseudo-ciencia.      
     El sueño del hombre en poder descubrir un análisis de la naturaleza humana por medio de la ciencia y poder desarrollar un estudio científico para el tratamiento de una conducta o comportamiento inaceptable ha sido muy seductivo.   La esperanzada ciencia del comportamiento humano, prometía mucho a aquellos quienes han estado batallando para descifrar o desenredar la enorme complejidad de personalidades individuales en circunstancias complejas similares.  Por lo tanto, a través del estudio y la imaginación, los psicólogos persiguen el sueño del descubrimiento de métodos científicos de observación, y de explicar y transformar el comportamiento humano.
     La psicología clínica y su arma activa de psicoterapia han indudablemente adoptado una postura científica. Sin embargo, desde un punto de vista estrictamente científico no han podido cumplir con los requisitos requeridos. Al intentar evaluar el estado de la psicología,  la Asociación Psicológica Americana nombró a  Sigmund Koch para planificar y dirigir un estudio que ha sido subvencionado por la Fundación Nacional de Ciencia. Este examen involucró ochenta eminentes eruditos, quienes evaluaron los hechos, teorías y métodos de la psicología.  Los resultados de este amplio estudio fueron publicados en una serie de siete volúmenes titulados "La Psicología: El Estudio de una Ciencia".
     Koch describe el engaño de las personas quienes representan la psicología como ciencia.  Él dice: "La esperanza de querer demostrar que la psicología es una ciencia no ha dado resultado, ya que el resultado llegó a ser indistinguible o no ser diferente de lo que ya se llama ciencia psicológica. Toda la historia posterior de la psicología puede ser vista o definida como una actividad ritualista, que lo en realidad hace es emular las formas de una ciencia, para mantener la ilusión de que la psicología en sí, es una ciencia.
Koch dice: "A lo largo de la historia de la psicología como ciencia, el verdadero o real conocimiento ha sido uniformemente negativo". Él afirma que gran parte de la psicología no es una disciplina acumulativa o progresiva en la que se agrega conocimiento al conocimiento. Más bien, lo que se ha descubierto por toda una generación "típicamente priva o anula  las ficciones teóricas del pasado". En lugar de refinar y especificar las más grandes generalizaciones del pasado, los psicólogos se han propuesto el reemplazarlas. Él agrega, "Creo que ahora está completamente y finalmente claro que la psicología no puede ser una ciencia coherente".  Koch sugiere, "Como el inicio de una terapia humilde, podríamos volver a bautizar la psicología y empezar a referirnos como 'estudios psicológicos'".   Y desde luego Koch critica la psicoterapia por vivir bajo "la ilusión de que ya es una ciencia", cuando en realidad no lo es.   
     Otra razón por la cual la psicoterapia no puede legítimamente llamarse una ciencia coherente es porque intenta contender con profundas complejidades humanas que no pueden ser observadas directamente o ser constantemente previstas. Además, el terapeuta y el cliente son cada uno individualmente único, y su interacción añade una dimensión adicional de variabilidad. Cuando uno agrega tiempo y circunstancias cambiantes, no es de extrañar que la relación terapéutica escapa los rigores de una ciencia.  Al considerar el dilema entre ciencia y la individualidad personal, el Dr. Gordon Allport dice: "El individuo, sea lo que esta persona sea, es por sobre todo una organización internamente coherente y única de procesos corporales y mentales. Pero es ésta individualidad que la ciencia considera vergonzoso. La ciencia, se dice,  cubre un área amplia, y preferiblemente leyes universales ... la individualidad no puede ser estudiada por la ciencia, sino solamente por la historia, por el arte, o por la biografía.  
     Podríamos añadir que el individuo no sólo escapa las fórmulas de la ciencia, sino también que desafía las descripciones de la literatura. Sin embargo, si uno debe elegir entre los dos, parece que la literatura ha revelado la humanidad en una forma más sincera. El idioma describe las complejidades de la individualidad mucho mejor que las fórmulas. El idioma y la literatura, en lugar de promulgar teorías de la personalidad y psicoterapia, lo que hacen es exitosamente  representar la naturaleza humana y dar un vistazo o vislumbrar las profundidades del alma, pero es la Biblia que mejor representa y da la verdad exacta acerca de la humanidad.
     Hay sutilezas y similitudes entre ciertas ideas de la psicología y el Cristianismo que aumentan la vulnerabilidad y que puede motivar a la persona a ministrar psicológicamente en vez de bíblicamente. El corazón engañoso encuentra a su amigo más amigable en un evangelio adulterado, donde se da rienda suelta a la naturaleza pecaminosa del hombre y donde el hablar en forma pecaminosa puede hacerse sin restricción, sin cuestionamiento o prueba. Por esta razón los Cristianos deben pasar tiempo en la Palabra y en oración en vez de buscar respuestas a los dilemas de la vida fuera de las Escrituras y de la iglesia. Una vez más, la psicoterapia y sus psicologías subyacentes no son ciencias.  Son las especulaciones humanas sobre el alma, con una fachada seudocientífica.
     Ha habido mucha búsqueda aparte de las Escrituras para poder encontrar maneras de ministrar al sufrimiento de los Santos, que ha producido un grupo entero de profesionales entrenados psicológicamente (o por lo menos psicológicamente contaminados) y consejeros laicos quienes están preparados para ministrar usando los caminos y la sabiduría de los hombres junto con las Escrituras, que parecen apoyar su práctica. Esto es sincretismo. Otros culpables de esta falsa integración son:
1) Las escuelas Cristianas y seminarios que promocionan positivamente el uso de asesoramiento psicológico o preparan individuos para ser licenciados como psicoterapeutas, especialmente las escuelas Cristianas que tienen programas acreditados por la Asociación Psicológica Americana (APA).
2) Pastores u otros quienes promueven y afirman ideas psicológicas y/o refieren o envían a congregantes a psicoterapeutas.
3) Autores y organizaciones que promueven un entendimiento psicológico del hombre.
4) Los que profesan ser Cristianos y quienes están profundamente comprometidos a esta "integración", cuyo origen es el no creer que la Escritura es suficiente para la vida y la piedad (2 Pedro 1:3).
     La ilusión o el engaño sin embargo continúa a pesar de esta declaración por los miembros de la Asociación Cristiana para Estudios Psicológicos, un grupo que incluye a psicólogos y consejeros psicológicos que profesan ser Cristianos: "muchas veces nos preguntan si somos  'Psicólogos Cristianos' y resulta difícil de contestar, ya que no sabemos lo que implica la pregunta. Somos cristianos, los cuales somos psicólogos, pero en realidad no hay ninguna Psicología Cristiana que sea aceptable y que sea radicalmente diferente a una psicología que no sea Cristiana o secular.  Es difícil el dar a entender, que nosotros funcionamos  en una manera que es fundamentalmente diferente de nuestros colegas seculares (o no cristianos).
     No estamos cuestionando la fe de los cristianos, que como psicoterapeutas, pastores y líderes de la iglesia, apoyan la psicoterapia y la psicología clínica.  Somos críticos, sin embargo, de su práctica y apoyo para estas actividades que niegan la suficiencia de las Escrituras. La Palabra es verdad; las teorías y prácticas de la psicoterapia que hablan en lugar de la Palabra de Dios escrita y de sus promesas, son falsificaciones. Esta mezcla de la psicología secular y el Cristianismo con sus nefarias consecuencias de haber corrompido la fe, ha llegado a tal apogeo, que aquellos que son conocedores de la verdad no hacen lo que es debido, es decir, predicar o enseñar la verdad del evangelio. Hay muchos pastores y líderes de la iglesia que creen lo mismo que nosotros, en lo que se refiere a la psicoterapia, pero no toman la iniciativa en alertar a la congregación de este compromiso religioso falso de la verdadera fe en la Palabra de Dios. A menudo hemos desafiado a cristianos que creen como nosotros en cuanto a la psicoterapia, para que pregunten a sus pastores si ellos tienen algún problema en referir o enviar a aquellos que tienen problemas personales, a un psicoterapeuta.
     La psicoherejía engaña al alma. O. Hobart Mowrer, en su libro titulado "La Crisis en Psiquiatría y Religión", hace una pregunta penetrante: "¿Ha vendido la religión evangélica su primogenitura por un plato de potaje psicológico?"  Los cristianos necesitan tener un objetivo, deben mirar detenidamente a su primogenitura y la confusión del potaje psicológico.  Sin una sujeción firme en la Palabra de Dios, estos llamados Cristianos se van a descarrilar y esto avanzará a medida que la decepción aumente exponencialmente en los días precedentes al retorno de Cristo.   
     Cuando se le preguntó sobre el tiempo de Su regreso, Jesús dijo: "Mirad que nadie os engañe". ¿Cuán profundamente engañados están esos cristianos que están buscando ayuda en la psicoterapia y sus psicologías subyacentes? ¿Cómo serán capaces de descubrir cuánto es el engaño, si ya han mezclado las nociones psicológicas engañosas y absurdas en su comprensión de la Biblia? Dos veces en el libro de Proverbios (14:12; 16:25) nos dice que hay una manera (la manera del mundo) que parece recto al hombre, pero se separa de la verdad de Dios y conduce a la muerte.
     Casi todos los que creen que han sido ayudados por la consejería psicológica finalmente reconocen que sus problemas mentales y emocionales no han sido resueltos ni han disminuido. En la segunda parte de estas series, confrontaremos el mito de la consejería psicológica, su supuesta eficacia y el valor de ministrar a la manera de Dios a través de la suficiencia de Su Palabra y la habilitación del Espíritu Santo (Peter 2: 1:3
Dr. Martin, Deidre Bobgan y T.A. McMahon 
Enero 2018

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https://www.thebereancall.org/content/psicolog-y-psicoterapia-primera-parte

domingo, 6 de marzo de 2016

Diez Puntos Erróneos y Efectos Negativos Del Calvinismo

1. Desalienta el testimonio cristiano.
2. Priva de sentido a las Escrituras.
3. Yerra respecto a la amplitud del plan de Dios para la humanidad.
4. Abre camino a ideas y prácticas extremas.
5. Inspira el orgullo en sus adherentes.
6. Emplea sofismas filosóficos.
7. Mina la fe en la justicia de Dios.
8. Convierte a Dios en autor del pecado.
9. Niega la responsabilidad humana.
10. Pone en entredicho el amor de Dios al mundo.


Samuel Fisk, Calvinistic Paths Retraced (“Recorriendo Las Sendas Calvinistas”), pág. 186